La estación del AVE en Girona estará inacabada cuando lleguen los trenes
Puigdemont logra fijar una reunión con técnicos de Adif la próxima semana
Girona
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18/10/2012
El presidente de Adif, Enrique Verdeguer, ha afirmado que en abril de 2013 -cuando está previsto que circulen los primeros trenes de alta velocidad entre Barcelona y Francia- la estación ferroviaria de Girona estará operativa pero no terminada.
Así lo ha señalado este jueves en declaraciones a los medios en Girona, tras supervisar el avance de las obras del nuevo túnel urbano y la estación ferroviaria de la ciudad.
Verdeguer ha garantizado que cuando llegue la alta velocidad la estación contará con todas las condiciones técnicas y de seguridad, es decir, que "estará absolutamente operativa desde el punto de vista de funcionamiento de los pasajeros", aunque quizá no esté totalmente terminada.
Asimismo, se ha comprometido a revisar y actualizar las siguientes fases del proyecto ferroviario de Girona, ya que inicialmente también se contemplaba la construcción de una nueva estación y el soterramiento del tren convencional.
Verdeguer ha recordado que ese proyecto se hizo en 2007 y que ahora las cosas "son muy distintas", por lo que se tendrá que revisar y buscar, por ejemplo, nuevas fórmulas de financiación acordes con los tiempos actuales si es que finalmente se decide avanzar en este sentido.
"Entendemos que Girona tiene una peculiaridad clarísima y tenemos que buscar, entre todos, fórmulas para poder hacer los proyectos viables y sostenibles", ha añadido.
Además, ha pedido disculpas a los vecinos de Girona por las molestias que hayan podido ocasionar las obras, y ha puesto de manifiesto su absoluta disponibilidad para que sean minimizadas y los barrios afectados queden tal y como estaban una vez acaben las obras.
Reunión técnica
El alcalde de Girona, Carles Puigdemont, por su parte, ha forzado una reunión este mismo jueves con el presidente de Adif y los portavoces de los diferentes grupos municipales con representación en el Ayuntamiento, para poder exponer a sus máximos representantes las inquietudes del consistorio y de la ciudad en relación al proyecto ferroviario.
En el encuentro, que no ha durado más de 20 minutos, se ha fijado una reunión para el próximo martes 23 de octubre, con una comisión técnica de alto nivel, que permitirá desencallar y poner sobre la mesa aquellas cuestiones que Girona considera necesarias.
Puigdemont ha aclarado que no han preguntado a Adif sobre el derrumbe del viaducto del tren convencional porque no es de su competencia, ya que la decisión le corresponde la Ministerio de Fomento.
Una cuestión es como Adif acaba esta obra, y la otra es si finalmente hay recursos para acabar las fases dos y tres del proyecto ferroviario o si tienen que descartarse definitivamente, ya que entonces algunas de las soluciones que hasta el momento está planteadas como provisionales quizá tendrán que ser definitivas.
El alcalde no ha querido revelar las peticiones que han hecho a Adif, pero ha manifestado que "el cambio de escenario puede provocar que aquello que tenía que ser provisional, tenga que ser definitivo".
Según ha expuesto, todos estos cambios tienen que ver con un posible escenario de "menor provisionalidad", relativo por ejemplo al acceso al vestíbulo, la nueva estación de autobuses y el edificio definitivo de la estación de tren.
A Girona le interesa tener una fecha, no por razones de construcción de la estación, si no por la política de promoción turística y comercial de la ciudad, ha añadido Puigdemont.
Así lo ha señalado este jueves en declaraciones a los medios en Girona, tras supervisar el avance de las obras del nuevo túnel urbano y la estación ferroviaria de la ciudad.
Verdeguer ha garantizado que cuando llegue la alta velocidad la estación contará con todas las condiciones técnicas y de seguridad, es decir, que "estará absolutamente operativa desde el punto de vista de funcionamiento de los pasajeros", aunque quizá no esté totalmente terminada.
Asimismo, se ha comprometido a revisar y actualizar las siguientes fases del proyecto ferroviario de Girona, ya que inicialmente también se contemplaba la construcción de una nueva estación y el soterramiento del tren convencional.
Verdeguer ha recordado que ese proyecto se hizo en 2007 y que ahora las cosas "son muy distintas", por lo que se tendrá que revisar y buscar, por ejemplo, nuevas fórmulas de financiación acordes con los tiempos actuales si es que finalmente se decide avanzar en este sentido.
"Entendemos que Girona tiene una peculiaridad clarísima y tenemos que buscar, entre todos, fórmulas para poder hacer los proyectos viables y sostenibles", ha añadido.
Además, ha pedido disculpas a los vecinos de Girona por las molestias que hayan podido ocasionar las obras, y ha puesto de manifiesto su absoluta disponibilidad para que sean minimizadas y los barrios afectados queden tal y como estaban una vez acaben las obras.
Reunión técnica
El alcalde de Girona, Carles Puigdemont, por su parte, ha forzado una reunión este mismo jueves con el presidente de Adif y los portavoces de los diferentes grupos municipales con representación en el Ayuntamiento, para poder exponer a sus máximos representantes las inquietudes del consistorio y de la ciudad en relación al proyecto ferroviario.
En el encuentro, que no ha durado más de 20 minutos, se ha fijado una reunión para el próximo martes 23 de octubre, con una comisión técnica de alto nivel, que permitirá desencallar y poner sobre la mesa aquellas cuestiones que Girona considera necesarias.
Puigdemont ha aclarado que no han preguntado a Adif sobre el derrumbe del viaducto del tren convencional porque no es de su competencia, ya que la decisión le corresponde la Ministerio de Fomento.
Una cuestión es como Adif acaba esta obra, y la otra es si finalmente hay recursos para acabar las fases dos y tres del proyecto ferroviario o si tienen que descartarse definitivamente, ya que entonces algunas de las soluciones que hasta el momento está planteadas como provisionales quizá tendrán que ser definitivas.
El alcalde no ha querido revelar las peticiones que han hecho a Adif, pero ha manifestado que "el cambio de escenario puede provocar que aquello que tenía que ser provisional, tenga que ser definitivo".
Según ha expuesto, todos estos cambios tienen que ver con un posible escenario de "menor provisionalidad", relativo por ejemplo al acceso al vestíbulo, la nueva estación de autobuses y el edificio definitivo de la estación de tren.
A Girona le interesa tener una fecha, no por razones de construcción de la estación, si no por la política de promoción turística y comercial de la ciudad, ha añadido Puigdemont.
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