El tren al puerto exterior de Ferrol tropieza con la oposición vecinal
El proyecto prevé construir un viaducto sobre una zona marisquera
Lorena Bustabad
Ferrol
17 ABR 2013
Que el Ministerio de Fomento se decantara por el trazado sur para
llevar el tren al puerto exterior de Ferrol ha puesto en pie de guerra a
ecologistas, mariscadores y vecinos agrupados en una activa plataforma a
la que se han sumado PSdeG, BNG, IU y AGE. 6,7 kilómetros de vías y
unos 100 millones de inversión para conectar la nueva dársena con los
muelles interiores de la ciudad y empalmar con la red estatal. El
ferrocarril cruzará la ensenada de A Malata sobre un viaducto de 285
metros que tendrá sus cimientos en el agua y atravesará los montes de
Brión y el humedal de Cariño por un túnel de 5.650 metros.
Son los dos aspectos más espinosos del camino de hierro a cabo
Prioriño Chico, una obra que la comarca ferrolana reclamó durante años
—primero a los socialistas y ahora a los populares— para garantizar la
competitividad de un puerto que se planificó sin accesos (ni tren ni
carretera) y al que pronto le salió un serio competidor en la orilla de
enfrente, Punta Langosteira. Para Adega, la ruta sur es la “sentencia de
muerte” para la ensenada de A Malata y su banco marisquero, vetado a la
extracción directa desde hace años por la altísima contaminación fecal.
Para el Gobierno, en cambio, supone un importante ahorro económico. La
ruta sur (6,7 kms) es más corta, más barata y tiene menos pendiente que
las opciones que se barajaron por el norte (10,3) y el centro (9,3).
“Globalmente, es la más ventajosa”, dice la Secretaría de Estado de
Medio Ambiente, aunque admite tiene "mayor impacto sobre el dominio
público marítimo terrestre".El recorrido elegido recibió una avalancha de alegaciones de ecologistas (Adega y SGHN), partidos políticos (IU, BNG e Independientes por Ferrol), sindicatos (CC OO) y mariscadores junto a 30 colectivos y seis particulares, que la Administración tardó más dos años en contestar con “respuesta sucintas y poco clarificadoras”, critica el BNG.
El 6 de abril, el BOE publicó la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del proyecto constructivo con algunos retoques sobre el original. Plantean una reducción del número de pilares del viaducto de A Malata que no concretan pero que oscila de dos a cinco frente a los 11 planificados. Para Adega, aún son demasiados. Opinan que los cambios que recoge la DIA son simples “modificaciones cosméticas” exigidas por Medio Ambiente a Fomento para justificar el trazado ferroviario. La resolución ministerial admite pero minimiza el impacto en los flujos marinos de la ría. “Una infraestructura que en teoría traería riqueza a la comarca se va a hacer de la peor forma posible”, lamentan los ambientalistas. Opinan que destrozará el humedal de Cariño y anulará el banco de bivalvos de A Malata destrozando el paisaje y los valores naturales “sin posibilidad de regeneración”.
La construcción del puerto exterior de Ferrol está plagada de despropósitos. Arrancó un fatídico 11 de septiembre del 2001 y consumió 183 millones en su primera fase y otros 30 en la segunda, que terminó de construirse hace tres años. El muelle se estrenó discretamente en septiembre del 2007 con un mercante chino sin acto oficial porque al puerto le faltaba un detalle menor: la carretera. Se abrió por tramos entre 2008 y 2009. El tren, en el mejor de los casos, no estaría operativo hasta 2020.
fuente http://ccaa.elpais.com/
No hay comentarios:
Publicar un comentario