Renfe oculta a sus viajeros el recorte de trenes impuesta por Fomento
El gobierno esperó al último día para rebajar la supresión de servicios prevista y provocó el caos.
Hace tres años que el Ministerio de Fomento era consciente de que,
por estas fechas, debía suprimir cientos de trenes deficitarios en toda
España por exigencia de la Unión Europea. Pero la reestructuración
comenzó el domingo sin que los usuarios hayan sido avisados con
antelación. Ayer seguía siendo difícil saber qué trenes estaban
circulando por Galicia. Fuentes de Renfe y del gestor de las vías, la
también pública Adif, atribuían el retraso a la hora de informar de los
servicios a decisiones políticas de última hora, para rectificar algunos
recortes inicialmente previstos. El ministerio, sin embargo, guarda
silencio.
La postura oficial de Renfe es que en las 48 horas que han pasado ya
con menos servicios no ha habido quejas formales por la falta de
información, pese a que las redes sociales llevan días ardiendo por
ello. Un portavoz oficial de la empresa, que atribuye los problemas a
"un tema técnico", no político, indica que la difusión de los nuevos
horarios "no se está haciendo con la suficiente rapidez, pero los trenes
están funcionando".
La respuesta también oficial de Adif es que por su parte no ha habido
ningún problema de disponibilidad de vías para los nuevos servicios.
Fuentes técnicas del gestor de la infraestructura indican que lo
habitual es saber con meses de antelación las franjas horarias en las
que circularán los trenes. Pero en esta ocasión, según admiten fuentes
de las dos empresas, hasta el mismo viernes se produjeron cambios
ordenados por Fomento para reducir el número de trenes a eliminar en
esta primera reestructuración. Como ejemplo, Fomento anunció hace meses
la supresión de la línea con menos uso de todas, Ourense-Puebla de
Sanabria, que en principio iba a desaparecer el pasado domingo. A última
hora, según admite el portavoz de Renfe, se decidió "retrasar" el
cierre, que en todo caso debe producirse este mes de junio.
Los cambios de última hora ordenados por Fomento explicarían también
el tropezón el pasado miércoles del conselleiro de Infraestruturas,
Agustín Hernández, al informar en el Parlamento de Galicia de la
desaparición, al margen del Eje Atlántico A Coruña-Vigo, de 72 de los
306 servicios semanales existentes, el 23,5%. Finalmente, según Renfe,
se suprimen 36 servicios, un 11,7%, (14 solo de Ourense a Sanabria) y
Galicia gana a cambio en conexiones con Madrid. Pero más allá de esta
cifra Renfe no pudo detallar ayer qué trenes son los que operan
actualmente dentro de la Comunidad. De ahí que el sindicato CGT pueda
decir que si solo se tienen en cuenta los servicios de media distancia
la reducción ha sido de 98, un 32%.
En la práctica, apenas se han reducido posibilidades de viaje entre
las principales ciudades gracias a que el hueco de esos trenes
regionales suprimidos ha sido cubierto con los nuevos convoyes de larga
distancia implantados. Pero sí se han eliminado paradas intermedias,
como las diez entre Ferrol y A Coruña que ya se han quedado sin tren. La
Xunta asegura que en todas las estaciones gallegas que se cierren hay
autobuses alternativos. A última hora de la tarde de ayer, después de
tres años de preparativos, la web de Renfe comenzaba a normalizarse,
aunque en ella seguían faltando algunos servicios que la empresa
aseguraba que sí continuarán.
Trenes que aparecen y desaparecen
De Santiago a Lalín había hasta el viernes tres regionales diarios.
El domingo se reestructuraron servicios, pero la web de Renfe no
permitía saber cuáles seguirían o no operando: “El tren consultado no se
encuentra disponible para la venta en estos momentos. Inténtelo de
nuevo más adelante y disculpe las molestias”.
La visita ayer por la mañana a la estación de Santiago tampoco fue
solución. Se retiraron los horarios y en las máquinas de billetes se
detallaban dos de los regionales, pero su compra también allí estaba
bloqueada. Y en la ventanilla ofrecían como respuesta que solo uno de
ellos operaría. Minutos después, un portavoz de Renfe lo contradecía
asegurando que serán dos los trenes diarios. Y por la tarde la
ventanilla volvía a responder que solo habrá un tren. Pero en la web los
trenes ya no estaban bloqueados para la compra. Habían desaparecido por
completo.
Aunque esta era la situación en la estación de Santiago, “en las que
no hay personal, la mayoría de Galicia, es donde está el problema,
porque hay gente que va y no existe el tren que iba a coger”, explica
Juan Francisco Sánchez Losada, del sindicato CGT, según recoge Europa
Press. En la Cadena SER hablaba ayer una usuaria, Toñita, atada al tren
de las 9.23 de Frieira a Vigo, que ha desaparecido. “Me estuvieron
engañando hasta el último momento, hasta el viernes”, decía la señora
abocada a perder su trabajo.
fuente
http://ccaa.elpais.com