Grandes proyectos de transporte siguen aparcados en Madrid: bus exprés, trenes, estaciones...
Una veintena de
infraestructuras de transporte público van con retraso o se han
paralizado por toda la región, por falta de dinero o embrollos
burocráticos.
La mayor parte del Plan de Cercanías aún no pasa del papel (aunque se
preveía para 2015), el tren a Navalcarnero está detenido y el metro a El
Casar no arranca.
Tampoco se harán los intercambiadores de Conde de Casal y Legazpi, el
cierre de la M-30, las líneas de bus exprés o el soterramiento de las
vías en el sur.
El fracaso con los Juegos de 2020 y Eurovegas también entierra trenes,
metros y carreteras que estaban vinculados a su construcción.
Durante la época de
vacas gordas, los ayuntamientos de la región, la Comunidad y el
Ministerio de Fomento se lanzaron a prometer nuevas líneas de metro y
autobús para barrios poco comunicados, ampliaciones de trenes de
Cercanías hacia los cuatro puntos cardinales de la región, grandes
intercambiadores de transporte y nuevas carreteras para desatascar el
tráfico. Gran parte de aquellas promesas todavía no han pasado del papel
y algunas de ellas, directamente, han sido enterradas por falta de
presupuesto.
En conjunto, los proyectos sumaban una inversión prevista de más de
10.000 millones de euros Concretamente, una veintena de grandes proyectos
de transporte y movilidad acumulan años de retraso, están aplazados sin
fecha o se han detenido definitivamente. En conjunto, los proyectos
sumaban una inversión prevista de más de 10.000 millones de euros. Entre
los mayores fiascos están el Plan de Cercanías (que preveía llevar el
tren a 12 nuevos municipios en 2015, pero la mayor parte de las
actuaciones siguen aún en estudio), los intercambiadores de Conde de
Casal y Legazpi (paralizados sin fecha), el tren de Móstoles a
Navalcarnero (que quedó con la obra a medio hacer), la red de líneas
exprés de autobús (el Ayuntamiento hizo tres y el resto no se han
llegado a ejecutar) o el cierre de la M-30 (pendiente de la eterna
operación Chamartín).
Los proyectos a la espera:
Tren Móstoles-Navalcarnero: La Comunidad proyectó una línea férrea que
uniría la estación de Móstoles Central y el municipio de Navalcarnero,
discurriendo en paralelo a la autovía A-5. Las obras llegaron a
comenzar, pero en 2010 se detuvieron por problemas económicos de la
empresa adjudicataria (la inversión inicial prevista era de 362 millones
de euros). "La ejecución se encuentra temporalmente suspendida por
problemas de financiación de la propia concesionaria", explica la
Consejería de Transportes. Actualmente, queda un inmenso agujero en las
inmediaciones de Móstoles, terrenos explanados y maquinaria, a la espera
de que las obras vuelvan a arrancar. "Desde la Comunidad y el
Ayuntamiento de Móstoles se está en conversaciones con el Ministerio de
Fomento para que se involucre en el proyecto" y volver a relanzarlo,
aseguran en Transportes. Sin embargo, de momento no hay avances a la
vista: "Sin fecha prevista de puesta en servicio", añaden en la
Consejería.
Tren Moncloa-Majadahonda: La conexión ferroviaria entre la capital y los
municipios del oeste se ideó para desahogar el corredor de la A-6, que
sufre astascos kilométricos a diario. El trazado se debería ejecutar en
dos fases: la Comunidad se encargaría del tramo entre Moncloa y el
Puente de los Franceses; y el Ministerio de Fomento continuaría la obra
hasta Majadahonda, donde se construiría una nueva estación de Cercanías.
La Comunidad ya tiene su proyecto redactado, pero ha decidido no
comenzar la obra hasta que Fomento inicie su tramo: "Los retrasos en la
tramitación del proyecto estatal hacen que la Comunidad no comience una
obra que no alcanzaría su funcionalidad completa sin la ejecución de la
otra parte", aseguran en la Dirección de Infraestructuras regional.
Los retrasos en el proyecto estatal hacen que la Comunidad no comience
la obra4
Metro a El Casar: La llegada de la línea 3 del metro al barrio de
El Casar (Getafe) todavía tendrá que esperar. El plan consiste en unir
la estación de Villaverde Alto con Metrosur, en Getafe, para que los
usuarios tengan una línea directa entre el centro de Madrid y los
municipios del sur. Tras años de desencuentros entre la Comunidad de
Madrid y el Ayuntamiento de Getafe, ambas administraciones firmaron un
convenio para financiar a medias la actuación. Sin embargo, la
Consejería de Transportes destaca que el Consistorio de Getafe todavía
no ha aportado la financiación a la que se comprometió. La idea inicial
era tenerlo listo en 2015, pero ahora "no hay fecha prevista de puesta
en servicio".
Plan de Cercanías: El Ministerio de Fomento presentó en 2009 un
ambicioso plan de ampliación de Cercanías, que debería llevar el tren a
doce nuevos municipios de la periferia regional en 2015. También
preveía, para esa misma fecha, una conexión entre el Corredor del
Henares y las ciudades del sur metropolitano, mediante un túnel que
atravesaría el subsuelo de la capital del noreste al suroeste. De
momento, la única gran actuación que está ya en funcionamiento es el
tren a la T-4 de Barajas. El resto no está parado totalmente, pero va a
paso lento y sigue en estudio a solo un año de cumplirse el plazo:
actualmente Fomento está redactando los proyectos (o incluso los
estudios previos) para la ampliación a Soto del Real, San Agustín de
Guadalix, Algete, Mejorada del Campo, Torrejón de la Calzada e Illescas.
Para ejecutar el plan se necesitaban 5.000 millones de euros, pero en
2014 solo se han presupuestado 3,7 millones, dedicados principalmente a
elaboración de estudios y a trabajos menores.
Intercambiadores: El Consorcio de Transportes planificó la reforma y
creación de siete intercambiadores en las entradas de la capital. De
ellos, solo se han reformado cuatro y se están finalizando las obras en
Avenida de América. En cambio, se han desechado los proyectos de
estaciones subterráneas en Legazpi y Conde de Casal, que requerían una
inversión de 56 millones de euros cada una. El Ayuntamiento y la
Comunidad de Madrid están "reconsiderando los proyectos, ya que los
antiguos estudios, debido a la crisis, no eran viables económicamente".
Actualmente, "se están estudiando nuevas propuestas para un futuro",
pero "no hay plazos", asegura la Consejería de Transportes. Por otro
lado, el Plan de Cercanías preveía un intercambiador en Alonso Martínez,
pero también está en barbecho. Al menos, sí se han construido áreas
intermodales en laza de Alsacia, Puerta de Arganda y Mar de Cristal.
El retraso en la operación Chamartín mantiene paralizados los proyectos
viarios de la zona
Líneas de bus exprés: El Ayuntamiento de Madrid
anunció una red de once líneas exprés de autobús, que unirían la
periferia y el centro de la capital, circulando por plataformas
reservadas y sin hacer paradas intermedias para ahorrar tiempo. Hasta el
momento, solo se han puesto en marcha tres (dos por O'Donnell y una de
Plaza Elíptica a Atocha) y el resto todavía no está en marcha. Lo que sí
contempla el Ayuntamiento (en su Plan de Calidad del Aire) es construir
carriles exclusivos para bus entre barrios de la periferia y "completar
la red de líneas transversales de la EMT", poniendo en servicio siete
líneas de bus en distritos del sur y el este de la capital.
Cierre norte de la M-30: Tras la obra de los túneles de la M-30, al
Ayuntamiento le quedó pendiente soterrar el nudo norte, en su cruce con
la A-1. El proyecto no se iniciará hasta que se desarrolle la operación
Chamartín, que prevé soterrar las vías del tren y construir una 'city'
financiera y residencial sobre el espacio liberado. Después de 20 años
de bloqueo, el Ayuntamiento llegó a un acuerdo con Fomento y se aprobó
el proyecto de prolongación de la Castellana. Pero la falta de
financiación privada por la crisis mantiene el plan paralizado, lo que
también provoca el retraso del cierre de la M-30. Según las previsiones,
el soterramiento costaría unos 1.400 millones de euros. Por otro lado,
también está pendiente el cierre de la M-50: la Comunidad se comprometió
a construirlo, pero su enorme coste le ha hecho replantearse el
proyecto a la espera de conseguir inversión privada.
Soterramiento de las vías en el sur: Los residentes del sur
metropolitano (Alcorcón, Fuenlabrada, Getafe, Leganés y Móstoles)
todavía están esperando que Fomento y sus ayuntamientos cumplan la
promesa de enterrar las vías del tren, que dividen sus municipios en
dos. En marzo de 2011 parecía que el proyecto sería pronto realidad,
tras la firma de un acuerdo de colaboración entre el Ministerio y los
alcaldes, pero todavía no hay avances a la vista. Según fuentes de
algunos ayuntamientos, esta obra en su conjunto costaría alrededor de
mil millones de euros.
Mamparas anticaídas del metro: La Comunidad inició un plan para instalar
mamparas protectoras en los andenes de las estaciones de Metro más
concurridas: su intención era evitar caídas a las vías y ayudar a la
regulación de la circulación de trenes. Pero el descenso en el número de
viajeros y la falta de presupuesto han pospuesto su ejecución. "Se
trata de un proyecto con un alto coste; cubrir toda la red costaría
cerca de 1.000 millones de euros", explica la Consejería de Transportes.
"En estos momentos, el proyecto de puertas de andén se encuentra a la
espera", añaden.
También están frenados los carriles bus-VAO o los aparcamientos
disuasorios
Infraestructuras de movilidad: Además de los cierres de la
M-30 y la M-50, hay otros proyectos específicamente ideados para el
vehículo privado que siguen en el aire: entre ellos están los carriles
bus-VAO en las entradas a Madrid por las autovías (para evitar los
atascos en hora punta), la red de aparcamientos disuasorios en la
periferia de Madrid (para que los conductores estacionen sus vehículos
fuera de la ciudad y no saturen el centro) o las áreas de prioridad
residencial de Justicia, Universidad y Ópera (que permitirían el paso
únicamente a los coches de residentes de estos barrios). Todos estos
proyectos están en estudio, pero frenados por falta de presupuesto.
Segunda circular del Metro: La llamada M-40 del metro iba a ser una
ampliación de la línea 11 que trazaría un arco por el este de la
capital, formando una segunda circular para unir las estaciones de toda
la periferia. El trazado se llegó a diseñar en 2005 y es una de las
infraestructuras de transporte más demandadas por los vecinos, pero
nunca llega a pasar del papel. De momento, la Comunidad no lo contempla
en sus planes de ampliación del metro.
Infraestructuras de los Juegos y Eurovegas: El fracaso de los
megaproyectos de los Juegos Olímpicos de 2020 y de Eurovegas también ha
contribuido a enterrar líneas de metro, carreteras y estaciones que
estaban vinculadas a su construcción. Muchos de estos proyectos viarios
solo tenían sentido para la celebración de estos acontecimientos, aunque
otros sí tenían interés para los vecinos de barrios cercanos.
La
candidatura de los Juegos contemplaba la construcción de dos estaciones
de Metro para las líneas 5 y 7, paradas de Cercanías en San Blas, Ifema y
Valdebebas, y conexiones con las carreteras M-40 y M-50. También se
planteó habilitar un tranvía por Madrid Río. Por su parte, el plan de
Eurovegas preveía otra estación de Cercanías y otra de la línea 10 de
Metro en Alcorcón, y conexiones con la M-45, M-50 y A-5.
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