Renfe y ADIF asumirán a medias la deuda de 600 millones que acumulan los trenes de Feve
La marca del ferrocarril de vía estrecha se mantendrá y el cambio de imagen tras la fusión se hará con pegatinas para abaratar los costes
Madrid / Oviedo, E. P. / E. L.
A partes iguales, la deuda de 600 millones que acumula la compañía ferroviaria de vía estrecha, Feve, se repartirá entre Renfe y la compañía que administra las infraestructuras ferroviarias, ADIF. Según explica Antonio Aguilar Mediavilla, presidente de Feve, unos mil empleados pasarán a formar parte de Renfe y 800 se integrarán en el ADIF.
En adelante será este último administrador ferroviario quien gestione la red de 1.275 kilómetros de vía estrecha de Feve, la mayor parte de ellos en Asturias. El material rodante se integrará en Renfe. Pese a ello, la marca Feve no desaparecerá del todo y, según confirmó Aguilar Mediavilla, los actuales trenes de la compañía serán explotados por Renfe bajo la marca Renfe-Feve. Con el fin de realizar el cambio de marca al menor coste posible, se dispondrá de pegatinas en los trenes con la nueva denominación e imagen.
La escisión y posterior extinción de Feve como empresa se enmarca en la reforma del sector ferroviario que el Gobierno aprobó el pasado mes de julio para mejorar su eficiencia y abrirlo a la competencia en julio de 2013. El desplome de Feve es espectacular. En el último lustro perdió 2,5 millones de viajeros. Además, marcada por la polémica gestión de su ex presidente Ángel Villalba, la compañía acumula una deuda de 600 millones, que ahora pasará a las cuentas de Renfe y el ADIF.
Según Aguilar, en el proceso de integración de la actual Feve en Renfe y el ADIF ha participado un total de diez grupos de trabajo. El presidente de la operadora de vía estrecha indicó que aunque la segregación de la compañía y la transferencia de activos se materializará el 1 de enero los «flecos» del proyecto se irán perfilando hasta julio del próximo año.
En el caso de las estaciones, pese a que serán titularidad del ADIF, su explotación correrá a cargo de Renfe, al igual que ocurre con las estaciones de cercanías. Feve es titular y explota 1.275 kilómetros de línea (340 kilómetros electrificados) repartida por las comunidades del Norte (Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco), además de Murcia y Castilla y León.
A partes iguales, la deuda de 600 millones que acumula la compañía ferroviaria de vía estrecha, Feve, se repartirá entre Renfe y la compañía que administra las infraestructuras ferroviarias, ADIF. Según explica Antonio Aguilar Mediavilla, presidente de Feve, unos mil empleados pasarán a formar parte de Renfe y 800 se integrarán en el ADIF.
En adelante será este último administrador ferroviario quien gestione la red de 1.275 kilómetros de vía estrecha de Feve, la mayor parte de ellos en Asturias. El material rodante se integrará en Renfe. Pese a ello, la marca Feve no desaparecerá del todo y, según confirmó Aguilar Mediavilla, los actuales trenes de la compañía serán explotados por Renfe bajo la marca Renfe-Feve. Con el fin de realizar el cambio de marca al menor coste posible, se dispondrá de pegatinas en los trenes con la nueva denominación e imagen.
La escisión y posterior extinción de Feve como empresa se enmarca en la reforma del sector ferroviario que el Gobierno aprobó el pasado mes de julio para mejorar su eficiencia y abrirlo a la competencia en julio de 2013. El desplome de Feve es espectacular. En el último lustro perdió 2,5 millones de viajeros. Además, marcada por la polémica gestión de su ex presidente Ángel Villalba, la compañía acumula una deuda de 600 millones, que ahora pasará a las cuentas de Renfe y el ADIF.
Según Aguilar, en el proceso de integración de la actual Feve en Renfe y el ADIF ha participado un total de diez grupos de trabajo. El presidente de la operadora de vía estrecha indicó que aunque la segregación de la compañía y la transferencia de activos se materializará el 1 de enero los «flecos» del proyecto se irán perfilando hasta julio del próximo año.
En el caso de las estaciones, pese a que serán titularidad del ADIF, su explotación correrá a cargo de Renfe, al igual que ocurre con las estaciones de cercanías. Feve es titular y explota 1.275 kilómetros de línea (340 kilómetros electrificados) repartida por las comunidades del Norte (Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco), además de Murcia y Castilla y León.
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